El hecho de que trascendiera una denuncia por discriminación a una joven, a la que no dejaron ingresar al “sector Vip” de un boliche de la zona noroeste de la ciudad de Córdoba, derivó en otra situación judicial.

Es que, el relacionista público denunciado es, a su vez, funcionario judicial en el Distrito 3.

La amiga de la joven que sufrió los hechos narrados hizo públicos audios y mensajes que intercambió, y allí se escucha: “No lo tomes a mal, pero te tengo que decir las cosas para que entiendas por qué los retuvieron en la entrada. Esa chica no es de la onda de Divi, no está para entrar al boliche. Sino, están mal dados los VIP. Es una carpa VIP, tiene que ser gente para eso.

Esa chica ni siquiera está para pasar. Sé que es tu amiga, pero a Divi va cierta clase de gente de una onda que no es para todos. Si sabía que el VIP era para ella no te lo doy. Hasta dudo (que pudiera entrar) con la general normal".

Según se supo, otro núcleo de actitudes del funcionario venían generando desencanto entre sus colegas, quienes no niegan su derecho a la defensa, pero solicitaron que ante la “pérdida de confianza”, sea apartado de sus funciones.

La principal cuestión aludida es la necesidad de comprobar que se encuentra preparado para escuchar a víctimas de delitos diversos y poder brindar la ayuda y contención necesaria.