Duckhee Lee tenía seis años cuando comprendió que era sordo pero eso no significó una barrera en su camino. A los siete empezó a jugar al tenis y desde allí no paró hasta hacer historia en las últimas horas: se transformó en el primer tenista sordo en ganar un partido ATP.

Lo hizo en el ATP 250 norteamericano de Winston-Salem al imponerse por 7-6 y 6-1 sobre el suizo Henri Laaksonen en una hora y media de acción. "La gente se burló de mí por mi discapacidad. Me dijeron que no debería estar jugando. Definitivamente fue difícil, pero mis amigos y familiares me ayudaron a superarlo. Quería mostrarles a todos que podía hacer esto", declaró.