Este domingo, al cumplirse 24 años del atentado a la Fábrica Militar de Rio Tercero, se realizó un oficio religioso en el Paseo del Milagro y luego se descubrió una baldosa con el nombre de Ana Griitti, en la Plazoleta de la Memoria.

Por la tarde, fue la ofrenda floral en memoria de las víctimas, en la Plazoleta de la Evocación, y se descubrió un mural de la Fábrica Militar.

Las actividades por los 24 años del atentado, según lo señaló la Justicia en un proceso oral y público, realizado en 2014, ocurrido el viernes de 3 de noviembre de 1995, en contra de la Fábrica Militar y de la ciudad de Río Tercero, se recordó el domingo, con diferentes actividades.

Por la mañana, como es tradicional, en el Paseo del Milagro, ubicado junto a lo que fue el sector en donde estallaron los depósitos de expedición y suministros de la estatal Fábrica Militar, se realizó una misa.

Además de familiares de las víctimas fatales, autoridades, encabezadas por el intendente Alberto Martino, junto al intendente electo, Marcos Ferrer y otros funcionarios, representantes de instituciones de la ciudad, vecinas y vecinos, como es tradicional, antes del oficio religioso, a las 8.55, fue el minuto de silencio, acompañado por la Banda de Bomberos Voluntarios.

Luego de las 10.30, en tanto, en la Plazoleta de la Memoria, en dónde se recuerda a las víctimas del terrorismo de Estado, y la importancia de preservar la vigencia plena de los derechos humanos, a través de una iniciativa de la Asamblea Permanente de los Derechos Humanos (APDH), se descubrió una baldosa con el nombre de Ana Gritti.

"Coca", como era conocida en la ciudad, viuda de Hoder Dalmasso, uno de los fallecidos producto de aquel hecho, fue la única querellante en la causa penal, además de ser cofundadora de la APDH en la ciudad.

A través de su lucha, como vecina y letrada, se evitó que se cerrara como un accidente. Finalmente, en el año 2014, tres años después de su fallecimiento, se desarrolló en Córdoba un juicio oral y público, en donde fueron condenados cuatro exmilitares con funciones jerárquicas, en 1995, tanto en la planta estatal como en la DGFM. .

Sus dos hijas constituidas en querellantes, con el patrocinio de los abogados Aukha Barbero, Horacio Viqueira y Ricardo Monner Sans, presenciaron el juicio en donde los integrantes del Tribunal Oral Número 2, finalmente le otorgarían la razón a su madre: había sido un atentado destinado a borrar el faltante de proyectiles, producto del contrabando ilegal de armamentos durante de la presidencia de Carlos Menem.

Para la tarde, en tanto, como es habitual, a las 18, los familiares de las siete víctimas fatales, con la compañía de vecinas, vecinos, autoridades municipales, el gremio de ATE y la CTAA, depositaron una ofrenda floral en el monumento ubicado en la Plazoleta de la Evocación.

Más tarde, en Avenida General Savio, junto a la ciclovía, que corre paralela al polo fabril químico, se descubrió el mural que surgió como iniciativa de familiares de trabajadores de la industria y que fue pintado por profesoras y estudiantes de la Escuela de Bellas Artes, Lino Eneas Spilimbergo.

Fuente: Tercer Río Noticias