Las absoluciones al expresidente Carlos Menem y quien fuera titular de la DAIA, Rubén Beraja, son puntos que quedan flotando y que serán apeladas, al conocerse el fallo del Tribunal Federal Oral Nº 2 de este jueves, en el marco del encubrimiento del atentado a la Asociación Mutual Israelí en Argentina (AMIA), ocurrido en 1994 y dejando como saldo 85 muertos.

Sin embargo, familiares de víctimas que fueron querellantes en el caso pudieron celebrar, casi 25 años después, que hubo un granito de justicia.

El fallo confirmó que hubo un encubrimiento desde el más alto nivel político y judicial durante el primer juicio, que indaga en los responsables del hecho terrorista.

En ese marco se encuentran las penas a quien fuera juez del caso, Juan José Galeano (seis años de pena), y los fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia (dos años en suspenso para cada uno).

El fallo judicial contradijo la postura del gobierno nacional, querellante en el caso y en una jugada que fue denunciada por la agrupación de familiares de víctimas Memoria Activa.

Dirigidos, aducen, por el ministro de Justicia, Germán Garavano, habían pedido la absolución de los exfiscales, a quienes finalmente se condenó como responsables.

En la sentencia, se confirmó que hubo "graves violaciones a los derechos humanos", y el marco fue el pago de soborno y torturas a efectivos de la Policía Bonaerense, a quienes se intentó responsabilidad en el vergonzoso primer juicio.

AMIA, el fallo por encubrimiento