Cumplidos tres años desde que el Tribunal Oral Federal 2 iniciara en Comodoro Py el juicio por encubrimiento del atentado a la Asociación Mutual Israelí en Argentina (AMIA), este jueves continuaron los alegatos finales, en este caso con conceptos del extitular de la DAIA, Rubén Beraja.

Uno de los trece imputados en el proceso en el que se confirmó el pago de una coima al reducidor de autos robados Carlos Telleldín, para que acuse a integrantes de la Policía Bonaerense, hizo uso de su derecho de defensa en la última audiencia del año.

Fuertemente cuestionado por los familiares de las víctimas, organizados en la agrupación Memoria Activa, no sorprendió que Beraja sentenciara que aquel 18 de julio de 1994 se trató de un “molesto día”, por el que “la tragedia sigue tronando en mi interior como el demoledor estruendo”.

Se ocupó, en sus dichos, de distanciarse de la política y partidos políticos, con los cuales “nunca tuve nada que ver” y fue ”totalmente ajeno a ese poder”.

Memoria Activa resaltó, después de que Beraja adujera el rechazo a la indemnización ofrecida por el Estado a la DAIA, el contrapunto respecto a los fondos percibidos desde el Banco Mayo.

“Yo estoy acá por la actividad que desarrollé en cumplimiento de mi misión como presidente de DAIA y pido mi absolución”, concluyó.

También se produjo la declaración de otra imputada, Ana María Boragni, esposa de Telleldín en aquel momento, quien pidió “comprensión” respecto a su situación, y ratificó que fue violada en la sede policial del Departamento de Protección al Orden Constitucional (POC) y efectivos, a su vez, abusaron de su hija de trece años en su domicilio: "Escucharon lo que quisieron".

Cuestionó a "la colectividad judía", que a sabiendas de su inocencia reiteró los pedidos de su detención.

“Sí, yo era la putita de mil dólares la noche. Lo hice para mantener a mis (cuatro) hijos porque el Estado me sacó todo. Tuve a los tres poderes del Estado en contra, y a la comunidad judía... sí, cobré los 400 mil dólares. Era eso o la unidad 20. No tenía alternativa. Con Menem no se jodía. Todo venía de Menem, de Corach y dentro del estudio de Galeano. Con el turco no se jodía. Era la orden de él”, graficó.

Encarando su proceso final, la causa viene a saldar la vergüenza del primer juicio por el hecho, ocurrido en 1994: un juicio que terminó siendo nulo.

No casualmente el juez de aquel entonces, Juan José Galeano, se encuentra imputado junto a los fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia. También se indaga en las responsabilidades del expresidente Carlos Menem, el extitular de la SIDE, Hugo Anzorreguy, Patricio Finnen, el abogado Víctor Stinfale, más Juan Carlos Anchezar, Jorge “Fino” Palacios y Carlos Castañeda.