Cuando llega ese esperado momento de la emisión de una tarjeta, las emociones de lo que implica tener un método de pago propio pueden opacar otras cosas como, por ejemplo, saber utilizarlo correctamente o terminar de entender su funcionamiento. 

Existe una gran variedad de tarjetas de crédito: Visa, MasterCard, American Express, tarjetas corporativas, tarjetas personalizables… pero la lógica detrás de ellas es la misma. Igualmente, coinciden en que la emisión de la tarjeta es el final de un proceso de creación de la tarjeta de crédito, pero también el comienzo de otro: el del financiamiento. 

Por eso, es necesario conocer con detalle sobre las tarjetas de crédito para aprovechar al máximo sus ventajas y evitar problemas crediticios.

¿Qué es una tarjeta de crédito?

Una tarjeta de crédito es uno de los productos financieros más comunes y utilizados que existen. Se trata de una herramienta que entrega diversas alternativas de financiamiento para la compra de bienes y servicios, a partir de la premisa de poder pagar en diferido. Es decir, con un dinero que, en ese momento, no se cuenta, o un pago que se terminará abonando más adelante. El banco o ente emisor adelanta el dinero y el cliente lo devuelve al cerrar el ciclo de la tarjeta con el pago del resumen correspondiente.

Se podría decir que su mecanismo es similar al de un préstamo, pero de forma inmediata y en montos quizás menores. El límite disponible para cada persona es definido a partir de una evaluación de la situación crediticia y financiera.

¿Qué es el pago mínimo?

El pago mínimo es la cantidad mínima que un cliente debe pagar mensualmente para mantener vigente el crédito de la tarjeta sin entrar en mora. Corresponde a un porcentaje total del resumen y está indicado en el extracto, junto con la fecha de cierre del período contemplado y la fecha de vencimiento para el pago.

Esta opción es una buena alternativa para mantenerse en regla incluso cuando no se cuenta con el dinero necesario para cancelar las deudas y/o financiamiento, aunque hay que considerar que implica el pago de intereses que se recalculan y producen un endeudamiento mayor.

Intereses de las tarjetas de crédito

Al funcionar de manera similar a un préstamo, las tarjetas de crédito también trabajan con algunos intereses asociados respecto de los montos y la cantidad de cuotas de financiamiento. El interés se calcula teniendo en cuenta el Costo Financiero Total (CFT), que es el valor que una persona deberá pagar por financiar una transacción en cuotas.

Fuente: Freepik
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¿Cómo hacer buen uso de la tarjeta de crédito?

Como toda herramienta financiera, utilizar bien la tarjeta de crédito desde el momento de su emisión es la mejor forma de aprovechar los beneficios que ofrece. Estos son algunos consejos al respecto: 

  • Utilizar la tarjeta de crédito en compras que ofrezcan productos o servicios en cuotas sin interés, pero no de pagos comunes o habituales, y sin exceder el límite de posibles gastos mensuales.
  • Pagar el resumen en tiempo y forma para evitar comisiones por retrasos y mantener un historial crediticio favorable.
  • Evitar usar la tarjeta de crédito para retirar efectivo, ya que suma comisiones e intereses.
  • Mantener registrados los gastos de cada mes para advertir eventuales cobros incorrectos, así como tener mayor conocimiento sobre las operaciones realizadas.
  • Revisar el cobro de la anualidad y pagarlo a tiempo.
Fuente: Unsplash
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A partir del momento de la emisión de la tarjeta de crédito, se tiene tanto una responsabilidad como una oportunidad. Por eso, utilizarla correctamente es doblemente positivo. Con operaciones a conciencia y pagos puntuales, es posible sacar el máximo provecho posible de este producto financiero.