La Cámara de Diputados dio media sanción y envió al Senado el proyecto de ley que busca amortiguar la situación de los deudores de créditos hipotecarios UVA, lanzados durante el gobierno de Mauricio Macri.

Entre las cuestiones más importantes, la propuesta establece que la cuota mensual a pagar no debe exceder el 30% de los ingresos de los deudores y suspende los desalojos por un año. Por otra parte, se establece que en los créditos ya otorgados, el cómputo del 30% sea retroactivo al 1° de enero de 2023.

La iniciativa fue respaldada por 134 votos provenientes del Frente de Todos, el Interbloque Federal, Provincias y la UCR. 

Sin embargo, fue rechazada por 40 diputados del Pro, libertarios y la izquierda, mientras que 18 se abstuvieron, entre ellos, miembros del Interbloque Federal, Evolución Radical y Coalición Cívica.

Uno de los principales puntos del proyecto es la modificación del sistema de actualización de los créditos hipotecarios UVA, que fue establecido durante el gobierno de Juntos por el Cambio y se basa en la evolución de la inflación para ajustar las cuotas.

Además, la propuesta contempla la suspensión por un año de los juicios de desalojo, lanzamientos, embargos y cualquier otra medida preventiva o cautelar relacionada con viviendas adquiridas a través de este tipo de crédito.

Aquellos que estén sujetos al impuesto a las Ganancias podrán deducir hasta tres salarios mínimos al año, y los deudores podrán vender su propiedad junto con el crédito existente.

Además, en caso de que el deudor quede desempleado, el Fondo se hará cargo de hasta tres cuotas. 

En resumen, el valor de la cuota a pagar será determinado en función de la actualización mensual del saldo de capital según un índice determinado en la ley, como el índice actualizable por remuneración imponible promedio de los trabajadores estables (IAR) o cualquier otra variante basada en la remuneración imponible promedio de los trabajadores estables (RIPTE).

Cualquier diferencia entre la cuota pagada por el deudor y la que debería recibir la entidad financiera según las condiciones originales del crédito será compensada monetariamente por el Fondo Fiduciario de Compensación y Promoción Hipotecario (FFCPH).

El documento también define los límites del grupo beneficiario de la medida: para los deudores de créditos de hasta 200.000 UVAs la cobertura es hasta las 120.000 UVAs, mientras que para los préstamos de más de 200.000 UVAs no aplica ningún beneficio de compensación.

Por otra parte, tampoco se permite extender la duración del crédito más del 25% del plazo originalmente acordado.

Los argumentos de quienes votaron a favor y en contra

En el cierre del debate, el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda, Carlos Heller aseguró que "si los créditos UVA se hubiesen otorgado con la fórmula que hoy estamos aprobando no tendríamos el problema que existe" y dijo que "esto no resuelve pero lo morigera y una expectativa positivo hacia adelante".

El diputado de Evolución Radical, Martin Tetaz, justificó el rechazo al proyecto al afirmar que "el UVA es un muy buen mecanismo para permitir la existencia de créditos de largo plazo en países de alta inflación" y "por eso el planteo nuestro fue no crear un problema donde no existe" y por eso "la preocupación es que cuidemos mucho el sistema de créditos UVA, pero podemos trabajar para mejorarlo".

"Si nosotros rompemos el mecanismo UVA ahora, lo que vamos a hacer es condicionar el futuro de millones de familias argentinas, que tienen la única herramienta de acceso a la vivienda como lo es el crédito hipotecario", agregó.

El radical Julio Cobos dijo que "cuando escuchamos que el problema no está porque no hay morosidad, pero no existe porque tuvimos mucho tiempo la cuota congelada y porque lo último que deja de pagar una persona es su vivienda".

Defendió el dictamen de mayoría al afirmar que "lo construimos en base a once proyectos donde todos tuvimos que ceder algo" para alcanzar un acuerdo y dijo que "la magnitud del problema son 95 mil créditos, donde se pasa a la cuota hogar y se crea un fondo compensador con recursos de la secretaria de Vivienda, acá no está poniendo dinero el estado sino lo está poniendo el sistema bancario".

La diputada del Frente de Todos, Paula Penacca, señaló que "estamos aquí intentando resolver un gran problema que nuestra gestión no generó, que se creó en el 2016 cuando el macrismo decidió romper el acceso a la vivienda que se implementaba desde el 2012 que fue el Procrear" y dijo que en el 2015 "dejamos una política con bajo nivel de endeudamiento".

El diputado de Republicanos Ricardo López Murphy señaló que "los créditos UVA no funcionan en el país, no por la inflación, sino porque el nivel de vida en la Argentina está bajando, fomentando así actividades que nos empobrecen e informalizando el mercado de trabajo".

El legislador de izquierda Nicolás del Caño dijo que la cuota "ya se hace impagable para los trabajadores y este gobierno no resolvió absolutamente nada de este problema que afecta a más de 100 mil familias" y destacó que "claramente los bancos están haciendo un enorme negocio" y dijo que "esta ley no va resolver y vamos a seguir en la pelea".

Por su parte, el diputado de Avanza La Libertad y precandidato de JXC, José Luis Espert, criticó el dictamen de mayoría al afirmar que "sería más cristalino de cara a la sociedad asignar una partida presupuestaria que diga: 'vamos a subsidiar por este monto con los pagadores de impuestos', para que los préstamos UVA tengan menos problemas de irregularidad".