Posiblemente desde aquellos hechos, la llegada del mes de diciembre cambió su significado simbólico a nivel país.

Las 39 víctimas fatales que dejaron la represión del 19 y 20 de diciembre de 2001 no dejan de ser una herida abierta en el país.

Y camino a los veinte años del hecho, este miércoles el presidente Alberto Fernández recibió a representantes del colectivo de familiares de los asesinados en aquellas trágicas jornadas.

En el trágico listado hay dos cordobeses. Uno es David Moreno , quien tenía 13 años cuando una bala de plomo lo alcanzó mientras miraba cómo se intentaba saquear un supermercado en Villa 9 de Julio, mientras miraba el intento de saqueo a un supermercado.

En 2017 recién hubo sentencia para el policía Hugo Cánovas Badra, por "homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego". Fue condenado a 12 años y 8 meses de prisión, aunque recién fue detenido unos años después, tras agotarse sus recursos judiciales. No hubo jefes ni funcionarios entre los acusados.

Allí se absolvió a Laura Estela Freire por el delito de falso testimonio y, se dictaron dos años de prisión en suspenso e inhabilitación a la comisaria inspector Daniela Alejandra Adán.

La otra víctima cordobesa fue Sergio Ferreyra .

Fue un caso escasamente conocido, ya que el joven de 20 años prácticamente agonizó durante un año. Tuvo durante todo ese tiempo una bala de plomo alojada en el hígado, la cual obtuvo durante un intento de saqueo a un comercio en Villa El Libertador.

Ley "reparatoria"

Tras el cónclave de ayer, los voceros de las familias que cargan con una muerte hace dos décadas agradecieron que el mandatario los haya recibido "para pensar juntos" aunque adujeron que "nos prometió un proyecto suyo, a modo de ley reparatoria".

María Arena , esposa de Gastón Riva, uno de los asesinados en Ciudad de Buenos Aires, adujo que Fernández "se comprometió a presentarlo en los próximos días para poder elevarlo lo antes posible".

Y agregó: "Esta ley incluye a las víctimas, a los familiares de las víctimas de todo el país que han quedado muy desprotegidos. Y es la manera que tenemos de que el Estado se haga cargo y responsable de los asesinados de nuestros compañeros".

También fueron parte del cónclave Marta Adelaida Almirón y Héctor Fernando Fiori, madre y hermano de Carlos Almirón, junto a Adriana Ochoa, prima de Gustavo Benedetto, y Marta Pinedo, la expareja de Alberto Márquez.