Algunos frigoríficos que faenan carne vacuna para el mercado interno dispusieron que desde este lunes no recibirán hacienda, por lo que el martes no habrá faena y podría empezar a haber dificultades con el abastecimiento en las carnicerías, en contra de la resolución del Gobierno Nacional que establece el troceo de la media res en cortes no mayores a 32 kilos.

La medida publicada el viernes último por la Secretaría de Agricultura de la Nación en el Boletín Oficial establece que partir del 1º de noviembre entra en vigencia esa modalidad, por la cual  las medias reses deberán ser fraccionadas en partes que no superen los 32 kilos, medida defendida por los exportadores por su mejora para el trabajador, por el menor peso de carga, destacaron las mejores condiciones de higiene y remarcaron que bajará el precio final ya que habrá menos desperdicio por parte de las bocas de expendio.

Desde la Federación de Industrias de Frigoríficos Regionales de Argentina (FIFRA), Daniel Urcía ratificó la medida de protesta y justificó la decisión en que “la mayoría no están preparados”  para ir al troceo de no más de 32 kilos.

En diálogo con el programa “Pensavalle informa” por radio Universidad, el dirigente expresó que la decisión “está apuntando al corazón del negocio de la carnicería tradicional y busca concentrar en grandes frigoríficos y grandes superficies el negocio, con la venta de carne en bandeja y en trozo, y a las 80 mil carnicerías nadie los consultó”.

Más adelante, señaló que la medida “no trae aparejado beneficios, porque si hay frigoríficos que no tienen las debidas condiciones es porque hay un estado nacional o provincial que lo permite” y agregó que “implicará mayores costos” a los frigoríficos y por ende, un aumento en los precios en el mostrador.

“La mayor necesidad de tener carne en frío en el frigorífico, mayor mano de obra, mayor utilización de transporte, necesariamente implica un mayor precio por lo que hoy se paga la media res, que indudablemente el carnicero lo tiene que trasladar a precios” dijo.

Urcía  ratificó la medida de no faenar desde el martes, ante “la imposibilidad de dar cumplimiento a la situación que discrimina al comercio minorista respecto al mayorista para la utilización de medios mecánicos que obliga a sacar trozos menores a 32 kilos”.

Finalmente, aclaró que si el Gobierno da marcha atrás con la medida, se volverá inmediatamente a la normalidad. Por su parte, el Servicio Nacional de Seguridad Alimentaria (Senasa) aseguró que el 80% de los establecimientos están en condiciones de comenzar con el troceo.

La nueva resolución apunta también a un mayor control sanitario y fiscal por parte del Estado, para evitar maniobras de evasión, ya que  las plantas faenadoras, de acuerdo con su modalidad comercial, deberán prever en playa de faena la cantidad de trozos que se realicen, cada uno de ellos deberá encontrarse identificado con el número de tropa, correlativo de faena, clasificación y tipificación. Los sellos sanitarios y comerciales obligatorios deben resultar en todos los casos perfectamente legibles.

Además los sellos deberán ser reemplazados por etiquetas en un plazo de 180 días, y contendrán como mínimo el nombre, números de inscripción en los registros y de habilitación sanitaria y Código Único de Identificación Tributaria (CUIT) del establecimiento faenador.

También deberán llevar el nombre, número de inscripción en los registros y CUIT del titular de faena, además de la fecha de faena, números de tropa y de garrón, clasificación, tipificación y destino comercial, cantidad de dientes, tipo de contusión y denominación del trozo.

Entrevista a Daniel Urcía-Federación de Industrias Frigoríficas Regionales de Argentina (FIFRA) by cba24n.com.ar