Está más que claro que los lavarropas pertenecen al grupo de electrodomésticos indispensables en el hogar. Pocas son las personas que disfrutan lavar a mano, pero son aún menos si se trata de la ropa de cama y ni hablar de los jeans, que son super pesados cuando se mojan.

Como cualquier otro artefacto electrónico, el lavarropas también ha tenido algunas mejoras considerables en diferentes aspectos; por ejemplo, ahora son más ahorradores de energía y tienen programas especiales que hacen más sencillo lavar en casa telas delicadas.

Por su puesto, cada familia es un caso particular y, por ende, sus necesidades de lavado también; es por esa razón que hay que tener presente una serie de cuestiones sobre los lavarropas antes de elegir el ideal para tu hogar.

Esta guía definitiva o tips lavarropas aplican para quienes están por comprar el suyo por primera vez o para quienes deben renovarlo.

Carga frontal o superior

Antes de decir siquiera la marca, la clave del éxito sobre el lavarropas está en el tipo de carga. ¿Por qué? Aunque parezca un asunto simple, esta característica determina la practicidad para cargar la ropa e incluso el lugar donde irá instalado.

Los lavarropas de carga frontal tienen diseños más modernos. Sobre ellos se puede colocar una estantería para almacenar el detergente y ganar espacio, o incluso el lavarropa podría ir debajo una mesada. Sin embargo, la desventaja es que no son tan cómodos para cargar y descargar las prendas.

Caso contrario ocurre con los lavarropas de carga superior, así que son buenas candidatos si el espacio no es problema; además, son los más recomendados si hay niños en casa porque el panel de control está fuera de su alcance.

Automático vs Semiautomáticos

Es entendible que en ocasiones el precio es un factor clave al momento de elegir; sin embargo, y al haber la posibilidad de enganchar alguna promoción, vale la pena inclinarse por los automáticos.

Esto es así porque es muy sencillo aprender a utilizarlos, prácticamente funcionan solos; en cambio, en los semiautomáticos hay que estar pendiente de dosificar el jabón, cargar el agua y, además, los ciclos de lavados suelen ser más limitados.

Sistema de lavado ¿Cuál elegir?

Hay tres tipos de sistemas de lavado: europeo, americano y oriental; básicamente la diferencia entre ellos tiene que ver con los movimientos que realiza el tambor para eliminar la suciedad de la ropa.

Los dos primeros son los más usados; el europeo es considerado el sistema que ofrece un lavado inteligente porque deja las prendas impecables sin afectar la calidad todo tipo de tejidos.

El sistema americano es eficiente, acepta mayor capacidad de carga y los ciclos de lavado son cortos; sin embargo, hay que tener presente que no se recomienda usarlos con prendas delicadas.

De cuántos kilos comprar el lavarropas

Este es otro punto que muchas veces se pasa por alto y, sin embargo, es vital pues define la cantidad de ropa que se puede lavar a la vez. Una manera práctica de definir la capacidad del lavarropas es en función a la cantidad de personas que componen el grupo familiar.

Si se compone de 2 personas, un lavarropas de 5 a 7 kg es lo más conveniente. A partir de 3 y hasta 5, la acumulación de prendas es mayor, con lo cual es más práctico contar con un lavarropas que permita una capacidad media-grande, es decir, un lavarropas de 8 a 9 kg.

Pero, si el núcleo familiar es de 6 o más personas, lo ideal es inclinarse por lavarropas con una capacidad de 10 a 12 Kg.

Eficiencia energética y consumo de agua

Cuando se trata de ahorrar todo suma y es aún mejor si también se contribuye a cuidar recursos tan valiosos para la vida como la luz y el agua.

Tal vez signifique hacer una inversión mayor al momento de adquirir el lavarropas, pero a la larga el ahorro en el recibo de los servicios, e incluso, en el consumo de jabón, será la gran recompensa.