En el medio de las incesantes negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para llegar a un acuerdo que permita pagar la deuda de 44 mil millones de dólares contraída por el gobierno de Macri, el titular del Banco Central de la República Argentina (BCRA) Miguel Pesce, reiteró el pedido para que el organismo de crédito internacional flexibilice las condiciones de préstamos extraordinarios como el que le brindó a nuestro país.

En el marco de las Jornadas Monetarias y Bancarias 2021, el funcionario remarcó que "hay que adecuar los plazos y las tasas de interés a los volúmenes de asistencia que puedan requerir los países miembros del fondo, especialmente los países en vías de desarrollo”. 

En esa dirección, Pesce pidió que se exploren “mecanismos bilaterales de asistencia a través de los bancos centrales y de mecanismos de swap de monedas” o se dé vía libre a la utilización de los Derechos Especiales de Giro (DEG) o la ampliación de los DEG que se dio este año a aquellas naciones que no los requieran para “poder canalizar estos recursos vía multilateral, pero también vía bilateral a aquellos países que requieren asistencia y que no necesariamente son países pobres”.

Se sostiene que la intención del Gobierno Nacional sería acceder a recursos que podrían aportar países como Rusia o China, que se usarían para ir cancelando deuda con el FMI y de esta manera, cambiar de acreedor y así liberarse de la necesidad de definir programas discales o monetarios con metas explícitas.

Cabe recordar que tanto en el FMI como en el G-20 se analizó la posibilidad de generar esos mecanismos de ayuda financiera, pero excluyendo de esa posibilidad a países “de ingresos medios” como la Argentina, por lo que el Gobierno pretende que se amplíe el criterio y que se incluya al país entre los beneficiarios.