Un médico le exigió a un peón rural el pago de 30.000 pesos para operar a su hija, pese a que la obra social cubría toda la intervención quirúrgica. Por ello, se ha iniciado una investigación contra el profesional de la salud y los responsables de la obra social insisten que el pago es ilegal.

El hecho ocurrió en el hospital San Juan Bautista de la localidad de Santo Tomé, donde Ignacio Álvarez debió operar a su hija de 20 años, que fue diagnosticada de litiasis vesicular.

Todo se realizaba con normalidad hasta que el médico Jorge Roses le exigió el pago de 30.000 pesos para la operación. Sin esa suma no habría intervención quirúrgica. La obra social que posee es Osprera (Obra Social del Personal Rural y Estibadores de la República Argentina).

Ignacio recurrió a amigos y familiares para reunir el dinero. "No se debe permitir este tipo de prácticas. La obra social cubre todo. Pero ante la requisitoria del médico, uno siempre se encuentra ante esa disyuntiva y más si se trata de un hijo. Esta gente no tenía ese dinero. Debió endeudarse para satisfacer al doctor y además la operación no salió bien y ahora debieron trasladar a la paciente a Posadas, donde deberá ser operada otra vez y no le cobrarán nada", explicaron al diario El Litoral fuentes allegadas a la familia Álvarez.

La obra social inició una investigación contra el médico Roses y reiteró que no se debe abonar ningún dinero extra sobre la cobertura médica. De lo contrario se debe exigir factura, para que la obra social responda el dinero al afiliado.