El Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol decidió respaldar la petición de Barcelona y de Real Madrid para que el primer clásico de la temporada se dispute el 18 de diciembre, ante la imposibilidad de disputarlo el próximo 26 de octubre a raíz de los últimos incidentes registrados en Cataluña por la sanción de prisión a los líderes del proceso independentista catalán.

Esto representa un fuerte aval al consenso de los clubes, que habían fijado su postura en sendos comunicados. Sin embargo, hay que esperar los movimientos políticos y hasta judiciales que podrían hacer las autoridades de la Liga, al considerarse perjudicada en sus intereses económicos, porque en esa misma fecha se disputan encuentros de la Copa del Rey, lo que afectaría su difusión a distintas partes del mundo.

El pedido de la Liga es que el clásico español se juegue el 4 de diciembre ya que en esa fecha no habrá partidos de otras competiciones. Barcelona se siente perjudicada por ese interés debido a que el 1º de diciembre tiene que disputar un partido ante Atlético Madrid, uno de los más importantes del calendario futbolístico de ambos equipos.