Tiene 21 años, vive en la pensión del club y mira videos del brasileño Hulk para copiarle movimientos. Tras su primer gol en Argentina posó como El Negro de Whatsapp: “Aparte de jugar hay que divertirse”, dice.

Llegó a Huracán detrás de los pasos de Arouna, su hermano mayor. Jugó en Huracán, probó suerte en Tigre y recaló en Sacachispas, en la Primera B, donde ayer anotó el primer gol en el fútbol argentino. Se trata de Moustapha Ngae A-Bissene, delantero camerunés de 21 años que se viralizó en las redes sociales por haber festejado el triunfo como El Negro de Whatsapp.

“Nosotros siempre tratamos de sacar lo mejor del fútbol; aparte de jugar hay que divertirse”, dice Bissene. Este tipo de bromas son comunes en el plantel del Lila, que comandado por Eduardo Dos Santos posó con caretas de la Liga de la Justicia, de Messi o de la Casa de Papel, y hasta le contestó a Pinino Más por decir que Boca había jugado el Superclásico como Sacachispas, o sea como equipo chico.

Nacido en Yaoundé, la capital de Camerún, llamó la atención en un torneo con su academia de fútbol al anotar 25 goles en 20 partidos. Lo sondearon de las selecciones juveniles, pero una lesión cambió sus planes. Fue entonces cuando recibió el llamado de Arouna y armó las valijas. Del Globo al Matador y después a Saca.

Vivió en un hotel del centro, pero se mudó a la pensión del Lila porque no tenía plata. Y allí conoció a su nueva familia: “En ningún club me trataron con tanto amor, ni siquiera en mi país”, reconoce.