Después de la ruptura de Cambiemos en Córdoba, cuando Mestre decidió ir por su cuenta luego de conocerse que no habría internas y se priorizó la fórmula de Negri con Baldassi, este último nominado como candidato a vice cuando ha sido el referente de cambiemos más votado en Córdoba y como si fuera poco, Luis Juez que también rompió con Cambiemos y se presenta para intendente de Córdoba, la líder de la Coalición Cívica-ARI bajó el tono al desacuerdo cordobés y aseguró que los dirigentes tomaron una “decisión racional" de cara a las elecciones del próximo 12 de Mayo en la Provincia.

En Cambiemos tomaron nota de lo sucedido en Córdoba y la derrota en Neuquén, aunque sin embargo hoy se proponen demostrar cómo perder todas las batallas y ganar la guerra apelando al "mal menor" electoral.

"El problema de Córdoba no es sólo del radicalismo sino que es de todo Cambiemos" afirmó Elisa Carrió quien dijo este lunes por la noche que el radical cordobés Mario Negri -a quien definió como “un compañero de ruta en la lucha republicana”- “es decisivo para la construcción de la República en la Argentina”, reafirmando su respaldo al precandidato a la gobernación de la provincia de Córdoba.

La diputada nacional habló en Todo Noticias después de la ruptura de Cambiemos en Córdoba para manifestar su apoyo a Negri después de que él y Ramón Mestre no acordaran una interna y anunciaran la presentación como precandidatos por separado. La líder de la Coalición Cívica-ARI bajó el tono al desacuerdo cordobés y aseguró que los dirigentes tomaron una “decisión racional" de cara a las elecciones, pese a su apoyo a Negri: "Estoy convencida de que con Negri vamos a hacer una extraordinaria elección.

Según publica el diario Perfil en su portal, Carrió remarcó que “Negri es el que mejor mide", dijo antes de anunciar que después de Semana Santa recorrerá Córdoba para acompañar al senador en su campaña. En la misma entrevista, la diputada reafirmó su voluntad de no presentarse como candidata a ningún cargo político pero advirtió que se pondrá al frente de la campaña para conseguir la reelección de Macri después de visitar Córdoba. “Estamos en un momento de crisis profunda y yo apoyo a Macri en la debilidad", concluyó. “La única que va a estar en el momento más difícil de las elecciones voy a ser yo”.

Por su parte el Diario La Nación publica en su portal que la primera escala de la gira de Carrió será Santa Fe, un distrito estratégico en términos electorales. Allí, buscará apuntalar la campaña del candidato a gobernador de Cambiemos, José Corral, con vistas a las PASO del 28 de abril. Las elecciones generales serán en junio. No será una contienda sencilla: allí el socialismo pretende un cuarto mandato consecutivo, esta vez de la mano del exgobernador Antonio Bonfatti. El peronismo presentará dos candidatos a dirimir en las primarias, Omar Perotti y María Eugenia Bielsa.

Después de Santa Fe, Carrió partirá rauda hacia Córdoba para apoyar a su amigo y candidato a gobernador, el radical Mario Negri. Tras la ruptura de Cambiemos en la provincia, Negri tiene un doble desafío: enfrentar al gobernador, el peronista Juan Schiaretti, quien busca su reelección, y derrotar a su rival interno, el también candidato a gobernador Ramón Mestre. Carrió apostará fuerte por Negri, no solo por la amistad que los une, sino, sobre todo, porque entrevé que detrás de la candidatura de Mestre están Coti Nosiglia, operador radical y archirrival de Carrió, y el ala más crítica de la UCR hacia la gestión de Macri.

La gira tendrá como tercera escala Entre Ríos, donde el candidato de Cambiemos, Atilio Benedetti, deberá remontar la enorme diferencia de votos que le sacó en las primarias del último domingo el actual gobernador y candidato a ser reelegido, el peronista Gustavo Bordet. Las elecciones generales serán el 9 de junio.

Carrió no solo recorrerá las provincias con el propósito de reforzar las campañas de los candidatos locales de Cambiemos. Su mandato principal es apuntalar a Macri y su reelección en octubre; su obsesión es impedir el avance del kirchnerismo y, con él, el peligro del retorno al poder del "fascismo de izquierda", como suele advertir. Consciente de que el Presidente atraviesa un momento crítico, de que su imagen cayó en las encuestas y de que la economía se empecina en dar malas noticias, Carrió ya anticipó al equipo de campaña, que comanda Marcos Peña, que se cargará la campaña al hombro en defensa del Presidente.