Después de la primera reunión entre las partes intervinientes en el transporte interurbano de Córdoba, el panorama lo marca la quita de subsidios de la Nación y el proceso selectivo de aportes del Gobierno, reducidos al área metropolitana y los servicios urbanos.

En ese marco, la Secretaría de Transporte prometió ayudar económicamente a empresas de todo el territorio para el pago de gasoil, aunque a la par indicó que no entregará “una solución fácil” y pidió a las firmas “que hagan los deberes” y busquen “alternativas”.

Desde la Federación de Empresarios del Transporte Automotor (FETAP), Enzo Noriega, dijo que “nos solicitaron una reingeniería con las frecuencias”, pero aclaró que “los servicios que están en problemas, no son los sobreofertados”.

La visión planteada es que las ganancias no son siderales en los puntos más olvidados de la provincia, generalmente alejados de la capital, sino que se prestan “para unir y comunicar localidades” y “no es transporte masivo”.

En diálogo con el programa A Pura Radio, de radio Universidad, Noriega sentenció: “Esto es un avance importante pero es insuficiente. La sobreoferta que puede haber es en las grandes urbes (que son subsidiadas). La carga en muchos casos es muy deficitaria”.

No descartó, en tal sentido, que puedan existir despidos, porque “entendemos que hay que reducir unidades y ocupación laboral” y “algún problema traería”.

Pero aclaró: “Apelamos a que en este proceso se haga un buen análisis, que sea gradual. Si se hace desde ese marco, no estaríamos en una situación de despidos masivos”.