A los 96 años de edad y después de 70 ejerciendo como monarca fallecio la Reina Isabel II. Pero la máxima dignataria de Inglaterra también destacó fuera de los ámbitos políticos, ya que se le reconoce como una fanática de los automóviles, donde obviamente existe una predilección por modelos de origen inglés, colección que va desde Range Rover hasta Bentley.

Es tal la cercanía de la Reina con el mundo motor, que incluso muchos de los vehículos que han pertenecido a la monarca se han exhibido en museos británicos. Esto por el gran valor monetario e histórico, ya que provienen de la Familia Real. Muchos de los carros que condujo la Reina Isabel II fueron  diseñados o modificados específicamente para su comodidad.

La Reina Isabel II y su garaje

Dentro de la lista resalta una pieza única, como el Rolls-Royce Silver Ghost de 1924. Este Rolls-Royce tiene casi 100 años de existencia y es totalmente funcional. Se estima que recorrió, a lo largo de todos estos años, alrededor de 900.000 kilómetros. Este modelo se mueve gracias a seis cilindros en línea de 7.428 cc, lo que le brinda una potencia de 60 caballos y así llegar a un máximo de 130 km/h.

La Reina Isabel II y su garaje

Otro de los autos más icónicos de la fallecida Reina Isabel II es el Lincoln Cosmopolitan, un clásico de 1949 que también hizo las veces de auto presidencial en Estados Unidos en 1950. Este era uno de los pocos modelos que tenía proveniente de Norteamérica.

La Reina Isabel II y su garaje

La lista continúa con el deportivo Aston Martin DB6 de 1965, del cual se fabricaron sólo 1.788 unidades. Con un estilo elegante, este descapotable era conducido por las propias manos de la monarca.

La Reina Isabel II y su garaje

Otra joya automovilística que deja la soberana de Reino Unido es el Humber Super Snipe. Modelo producido por la British Company Humber Limited entre 1938 y 1967. La corona adquirió una de las unidades de 1953, la cual contaba con una potencia máxima de 100 caballos.

La Reina Isabel II y su garaje


Continuamos con el exclusivo Bentley State, del cual solo se fabricaron dos unidades y ambos le pertenecen a la realeza británica. Este cuenta con un motor V8 de 6.75 litros y es una modificación de la versión Arnage R. Alcanza una velocidad máxima de 210 km/h.

La Reina Isabel II y su garaje

Tal es lo que representaba la Reina Isabel II en el mundo, que existe un modelo en homenaje a ella, el McLaren Elizabeth II. Este es un superdeportivo de la marca inglesa que se destaca por estar completamente pintado en tono plata.

De este Mclaren Elizabeth II sacaron a la venta pocas unidades y le obsequiaron uno a la monarca. El modelo fue creado por el departamento MSO de la marca. Cabe destacar que, a pesar de ser un obsequio, a Su Majestad nunca se le vio conduciendo este poderoso carro deportivo.

La Reina Isabel II y su garaje

Finalmente, cerramos este listado en homenaje a Su Majestad la Reina Isabel II con el Jaguar Daimler V8 Super LWB. Este Jaguar siempre fue conducido por ella y cuenta con detalles exclusivos como un soporte deslizante diseñado específicamente para la cartera de la monarca.