Mientras Córdoba había anticipado que a partir del lunes quedaba sin efecto la obligación de aislamiento laboral de los contactos estrechos asintomáticos y con esquema de vacunación completo, medida que también fue adoptada horas más tarde por el Gobierno Nacional, desde la CGT Regional Córdoba, advirtieron que la decisión puede "multiplicar los inconvenientes" y plantearon sus dudas en torno al cumplimiento de las medidas preventivas que estarán a cargo de las empresas.

La secretaria general adjunta de la organización y titular de la Unión Obrera Gráfica de la provincia, Ilda Bustos señaló que "existe por parte de las empresas una intención de optimización de ganancias y la salud pasa a un segundo plano". En esa dirección, criticó la medida tomada por la Provincia y por la Nación, que decidieron "apresuradamente por imposición del sector económico concentrado", donde los "trabajadores son la variable" de ajuste.

En diálogo con el programa "Es por Acá" por radio Universidad, la dirigente aseguró que "no está garantizado" que el sector patronal cumpla con la obligación de brindar medidas de protección adecuada a sus trabajadores (los barbijos km95) ni que afronte los costos de la realización de los Autotest.

"Tenemos todas las dudas sobre cómo será la implementación de esta medida" dijo Bustos, al asegurar que "ni la Unión Industrial Argentina, ni la de Córdoba, han dicho expresamente que vayan a asegurar" esas medidas. Advirtió también que no hubo "ningún mecanismo de consulta y consenso, ni de establecer una pauta común frente al reclamo empresario".

En esa dirección expresó que "estamos complicados porque se siguió un criterio económico, no de salud pública", al tiempo que aseveró que hay un sin fin de inconvenientes que con esta medida se van a multiplicar".

ILDA BUSTOS. Sec. Gral. adjunta CGT Regional Córdoba ES POR ACA 12 - 1 by cba24n.com.ar