El último tramo del largo mes de septiembre llega, en tierras cordobesas, con modificaciones en sus condiciones.

Por un lado se presenta un martes con rémoras invernales. Está vigente, en tal sentido, un “alerta amarillo” que incluye a casi toda la provincia, ante la presencia de fuertes vientos llegando desde el sur.

Tal motivo de por sí hace descender un mercurio que no superaría los 19 grados.

Pero a todo esto se suma un alto proceso de inestabilidad. De hecho fundamentalmente por la mañana se esperan lluvias, con carácter “aislado”.

Córdoba: en días de condiciones cambiantes, qué dice el pronóstico

Pero todo cambia el miércoles. El pronóstico encandila con la promesa de mucho sol y hasta los vientos giran, con una máxima prevista en 26 grados.

Para el jueves hasta se prevén ráfagas llegando del norte. Desde allí, las marcas mercuriales se sostienen estables.