Un hombre de 25 años resultó con graves quemaduras tras incendiarse la garita de vigilancia en la que pasaba la noche, en las canteras de Dumesnil y fue derivado al Instituto del Quemado, adonde permanece internado con pronóstico reservado.

De acuerdo a lo informado por la policía de Córdoba, cerca de las tres de la madrugada de este jueves, ingresa un pedido de auxilio a la comisaría de La Calera, por lo que los efectivos de Bomberos se dirigieron al lugar y lograron sofocar el incendio.

El operario, identificado como Andrés Pereyra, estaba tendido en el suelo cuando llegaron los efectivos y sufrió quemaduras de segundo grado en miembros inferiores y superiores. 

De acuerdo a las primeras valoraciones del servicio de emergencias que acudió al lugar, el trabajador presenta quemaduras en el 70 por ciento de su cuerpo.

De acuerdo a la información proporcionada por el propio damnificado a la policía, habría dejado un bidón de nafta cerca de una estufa eléctrica y se quedó dormido. Al despertarse, la garita ya estaba en llamas y su vestimenta estaba prendida fuego.