Finalmente, se confirmó la muerte del efectivo de la fuerza policial que, al verse acorralado después de robar un auto, se disparó en la cabeza.

Se trata del sargento Nicolás Loases, que se habría disparado con su propia arma.

Todo comenzó con el robo de un automóvil Chevrolet blanco en la mañana del viernes en barrio Poeta Lugones de la ciudad de Córdoba y la posterior huida. 

El autor del hecho era el propio sargento, de 35 años, y tras un largo recorrido fue acorralado en barrio Talleres.

En el lugar, el ladrón se bajó del auto y comenzó a correr media cuadra hasta ser interceptado por un efectivo policial. En ese momento, intentó trepar la pared de una vivienda para escapar.

Acorralada, la víctima se disparó y fue trasladado al Hospital de Urgencias en el momento.

Según se informó, el fallecido se encontraba de licencia psiquiátrica.