Finalmente, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y las cámaras empresarias del sector nucleadas en la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (FATAP), llegaron a un acuerdo en el intento por destrabar el conflicto salarial y evitar el paro por 72 horas lanzado por el gremio desde el martes.

César Pereyra vocero UTA by cba24n.com.ar

Cabe recordar que las empresas de transporte de pasajeros del interior del país, se negaban a conceder el aumento salarial reclamado por la UTA, aduciendo que no tenían asegurados los subsidios que brinda el Estado nacional hasta fin de año, y sin los cuales no podían afrontar los incrementos.

Sin embargo, tras numerosas reuniones en el marco del tratamiento del proyecto de presupuesto para el año próximo  en Diputados, a tratarse desde el martes, Eduardo Fernández, diputado nacional cordobés del Frente de Todos había adelantado el pasado viernes que los fondos de los subsidios para lo que resta del año “estaban asegurados”. 

No obstante, remarcó que para que ello ocurra “tienen que cumplirse todos los acuerdos de las jurisdicciones que concesionan el transporte y fijan las tarifas, que son las provincias y los municipios”. En ese sentido, remarcó que en los primeros cuatro meses del año, las provincias deberán haber iniciado al menos los procesos para implementar la SUBE en todo el país.

“Esto es para cumplir el criterio que el subsidio vaya a los ciudadanos y no a las empresas de transporte”, remarcó Fernández al asegurar que a través de la SUBE, el Estado puede controlar el destino de los subsidios. “Esto se demora en implementar, por lo que pusimos un plazo de cuatro meses”, concluyó.

Esta mañana el Ministerio de Trabajo había convocado a una nueva reunión conciliatoria de la UTA con los empresarios de la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (FATAP), en un nuevo intento por destrabar el conflicto por aumento de salarios para los conductores del interior del país, y evitar nuevas medidas de fuerza en el sector.

El encuentro de las partes comenzó a las 11, en la sede de la cartera laboral ubicada en la avenida Callao al 100, pero desde las 11.45 se reinició el encuentro en la sede de la cartera de Hacienda. 

La conducción nacional de la UTA, que lidera Roberto Fernández, realizó la semana pasada un paro de 48 horas en el interior del país en demanda del pago de un aumento salarial que ya había sido acordado en el marco de las paritarias del sector.

La medida de fuerza, que afectó a las líneas de transporte urbano de pasajeros en el interior del país, no comprendió al Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA) ni tampoco a las provincias de Río Negro, Chaco y La Rioja, donde se alcanzaron acuerdos con empresarios locales.

En el resto del país, los choferes de colectivos paralizaron sus tareas ante el fracaso de las negociaciones salariales con la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros en el interior del país.

En la negociación paritaria, los trabajadores del sector solicitaron un 50% de aumento para este segundo semestre de 2022, y los empresarios que brindan los servicios aducen no poder contar con los recursos para hacer frente a la situación.

La exigencia de UTA apunta a una suba del 15 por ciento en octubre, el mismo porcentaje en noviembre y otro 20% en diciembre.

En ese camino es que decretaron una medida de fuerza, prevista a partir de las 0 de este martes y extendida por 72 horas. Afectaría los servicios de Córdoba, Rosario, Santa Fe y el resto de las localidades del interior del país.

El pedido va en consonancia con lo ya acordado con sus pares del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y por eso la norma no afecta la prestación del servicio de colectivos en el mentado “Gran Buenos Aires”.

Los choferes ya pararon hace un par de semanas en los mismos términos, en medio del reclamo de intendentes y gobiernos provinciales por la “discriminación” en la distribución de subsidios.