Este lunes declaró Aparicio Díaz, el principal acusado en la causa de los sanadores egipcios. En su declaración, aseguró principalmente que no cometió ningún delito y que lo suyo era "una religión milenaria".

Junto a su esposa Carolina Laura Cannes son los dos únicos detenidos, los otros nueve imputados fueron o están siendo sobreseídos.

El hijo de ambos, Máximo Ángel Aparicio, está imputado pero no detenido y declarará este martes. 

Las imputaciones son por trata de personas con fines de explotación laboral y económica, reducción a la servidumbre, asociación ilícita y en el caso de Aparicio Díaz abuso sexual con acceso carnal.

La investigación es llevada a cabo el Juez Federal Nº3, el Dr. Miguel Hugo Vaca Narvaja. De no surgir contratiempos, esta causa podría ser elevada a juicio a mitad del próximo año.

Informe de Jorge Vasalo