Leandro Rodríguez Lastra, médico ginecólogo de la ciudad de Cipolletti, fue declaro culpable del delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público por obstruir un aborto no punible a una joven de 19 años víctima de violación.

El juez Álvaro Meynet dio a conocer su veredicto y en los próximos días informará la pena que puede ser de hasta 2 años de prisión en suspenso e inhabilitación para ejercer la medicina.

El hecho ocurrió en abril de 2017 cuando la joven de 19 años llegó al hospital Pedro Moguillansky de Cipoletti, derivada del centro de salud de la localidad Fernández Oro mientras ya cursaba un aborto. Había tomado pastillas para interrumpir ese embarazo.

Rodríguez Lastra era jefe del servicio de Ginecología del hospital y, según contó, tras evaluar el caso resolvió impedir que el aborto se produzca mediante la aplicación de medicamentos, accionando contrariamente a lo indicado por la ley provincial 4.796, el decreto provincial 182/2016 y la ley nacional 26.485.

La joven fue obligada a seguir con un embarazo no deseado y el bebé fue dado en adopción. “La joven fue sometida a torturas. Estuvo internada durante meses hasta que se le practicó la cesárea. El sufrimiento provocado ha sido muy alto”, explicó a Cosecha Roja Ruth Zurbriggen, integrante de la colectiva feminista La Revuelta. Desde el día del parto la chica estuvo bajo tratamiento psiquiátrico y tuvo varios intentos de suicidio.

El Ministerio Público Fiscal estuvo presidido por Santiago Márquez Gauna y Anabela Camporesi, quienes afirmaron en su acusación que “el ginecólogo hizo todo lo posible para no hacer la ILE pese a que en ese entonces no era objetor de conciencia”, por lo que lo definieron como un obstructor.