La medida del gobierno español de no permitir el acceso de público a los estadios en los espectáculos deportivos, involucra a las competencias internacionales, por lo que el encuentro entre Barcelona y Nápoli, por los octavos de final de la Liga de Campeones de Europa a jugarse el próximo 18 de marzo en el estadio Camp Nou, tendrá las butacas vacías.

Específicamente con respecto a este partido, la disposición surgió luego de la reunión que mantuvieron autoridades de la Generalitat (gobierno de Cataluña) y de la entidad azulgrana.

La medida tiene como antecedente lo ocurrido el 1 de octubre de 2017 cuando en esa región se estaba celebrando un referendo que evaluaba la posible decisión de independencia de Cataluña, algo que fue desechado por la justicia. Aquella vez Barcelona recibió a Las Palmas por La Liga.

Con respecto a Barcelona-Nápoli, es la revancha del partido que jugaron en el estadio San Paolo el 25 de febrero pasado, en el que igualaron 1 a 1.