Se sorteó la Copa de la Liga Profesional de Fútbol en Ezeiza y entre las ausencias de dirigentes se destacaron las de los altos mandos de Boca y River. Las explicaciones oficiales se fundaron en cuestiones de prevención: tanto Jorge Amor Ameal como Rodolfo D’Onofrio pertenecen a los grupos en riesgo por la pandemia de coronavirus. Sin embargo, todo indica que es más que eso.

Los presentes del Xeneize fueron Raúl Cascini y Marcelo Delgado, integrantes del Consejo de Fútbol, y el jugador Nicolás Capaldo. Por el Millonario fueron el secretario general Ignacio Villarroel y el futbolista Cristian Ferreira.

Minutos más tarde del sorteo de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol salió un comunicado conjunto de Boca y River en las redes en el que quedaron expuestos los verdaderos motivos: haberse quedado afuera de “una decisión tan importante para el futuro del fútbol y de los clubes” como lo fueron “las modificaciones sobre el contrato de televisación”.

La tirantez entre los dos grandes del fútbol argentino y AFA había crecido durante la pandemia, cuando el Xeneize y el Millonario habían pujado por mantener los descensos en la Primera División, algo que finalmente no ocurrió y que se sumó a viejos reclamos por la división del dinero del fútbol argentino.

El comunicado de Boca y River completo:

Tras los anuncios de la AFA de modificaciones sobre el contrato de televisación del fútbol, River Plate y Boca Juniors comunican que no fueron parte de la definición del nuevo escenario contractual.

Tras los anuncios de la Asociación del Fútbol Argentino de modificaciones sobre el contrato de televisación del fútbol, River Plate y Boca Juniors comunican que no fueron parte de la definición del nuevo escenario contractual y a su vez manifiestan que no consideran justo no haber participado de una decisión tan importante para el futuro del fútbol y de los clubes.

Si bien la AFA, a través de la Liga Profesional de Fútbol, tiene la atribución de tomar este tipo de decisiones, Boca y River son una parte fundamental del espectáculo deportivo y entienden que los dos clubes debieron ser consultados a lo largo del proceso que desembocó en este cambio en la titularidad del contrato de derechos televisivos, y no solo ser informados del resultado final.