El Wolverhampton se impuso 3-2 ante el Manchester City este viernes en condición de local por la fecha numero 19 de la Liga de Inglaterra.

El encuentro inició condicionado por la expulsión del arquero Ederson Moraes. El brasilero vio la roja por una mala salida que terminó en choque contra Diogo Jota. 

Con un hombre menos, el entrenador Pep Guardiola sacó al argentino Sergio Agüero y dispuso el ingreso del guardameta suplente Claudio Bravo. 

El conjunto celeste iba arriba en el marcador gracias a las conversiones de Raheem Sterling a los 25 (de penal) y 50 minutos.

Sin embargo en el complemento los Wolves supieron aprovechar la superioridad numérica y los espacios que dejó la defensa del City, con una pálida actuación del argentino Nicolás Otamendi.

Así el local logró la remontada con los tantos de Adama Traoré, Raúl Gimenez y Matt Doherty.

Con este resultado el equipo de Guardiola quedó con 38 puntos y no pudo acercarse al Liverpool, líder con 52 unidades, seguido del Leicester City con 39.