El conjunto catalán busca reposicionarse en lo más alto del fútbol internacional. Antes de la pandemia se hablaba insistentemente en la necesidad de un cambio de aire para agradar y convencer al crack argentino de finalizar su carrera en el Barcelona. 

La casi segura incorporación de Lautaro Martínez es el primer paso en esa dirección. Los conocedores del paladar de Leo, aseguran que amén de un recambio de Luis Suárez, al Barsa le está faltando el criterio y la administración de los tiempos de un partido, desde la salida de Xavi e Iniesta. Allí comenzó a tallar la variante de Pjanic, hoy compañero de Paulo Dybala y Gonzalo Higuaín. 

El exquisito volante de Bosnia llegaría en una transacción múltiple que contemplaría la cesión de jugadores por parte del conjunto español. El Barcelona no cuenta con el efectivo para erogar  la cuantiosa suma de la rescisión de Pjanic. Ahí ingresaría el trueque más una suma de dinero por el portugués Nelson Semedo. 

Si bien también se mencionó la posibilidad de que el trueque incluya a Arthur Melo, lo cierto es que el brasileño no tiene ningún interés en marcharse a la Vecchia Signora.

La opción de Semedo se presenta viable debido a que Sarri no quiso en el equipo a Joao Cancelo, no quedó convencido por Danilo, a Cuadrado lo vislumbra en otra posición y De Sciglio tiene un perfil más defensivo del que le gustaría.