Situación de máxima alerta en Italia, tanto en su apartado empresarial como en sus actividades deportivas y culturales. El Gobierno italiano ha oficializado el decreto por el que aisla a 16 millones de personas de diferentes territorios del país principalmente del norte, por el que impide la entrada y salida de los mismos de los ciudadanos, salvo casos especiales y justificados.

Previamente a ello, se había llegado al acuerdo para que las tres próximas jornadas de la Serie A se jugaran a puerta cerrada hasta el próximo 3 de abril, pero desde anoche el país italiano ha hecho oficial la intención de aislar a 16 millones de personas ante la expansión del coronavirus. Este nuevo escenario podría obligar a echar el cierre a toda la actividad deportiva, por completo. Es decir, ni con público ni a puerta cerrada.

Una posibilidad que no descarta el propio presidente de la Federación italiana de fútbol, Gabriele Gravina, que quiso responder a la petición de Damiano Tommasi, presidente de la asociación de futbolistas en Italia. Tommasi escribió en su Twitter: "¡Vamos a parar el campeonato!". Y, cuestionado por esta petición, Gravina respondió tajante en declaraciones a la RAI2: "Nada se puede descartar. Debemos ser realistas, existe esa posiblidad". Y es que Tommasi, preocupado por el estado de los jugadores, le reclamó el cese inmediato: "¿Necesitas algo más? ¡Detén el fútbol!".

Damiano Tommasi on Twitter

El jueves está prevista una asamblea de la Serie A para evaluar la situación y tomar una decisión al respecto. De momento, el fútbol continuará, a puerta cerrada, hasta el próximo 3 de abril, como acordaron hace unos días.

El fútbol italiano no descarta detenerse por el avance del coronavirus

Por su parte, los jugadores empiezan a mostrar sus opiniones. Una de ellas, la de Mario Balotelli, que se muestra muy contundente y asegura que lo mejor es parar cualquier tipo de actividad: "Paremos, la salud es lo primero. No quiero arriesgarme a enfermar para entretener a alguien".