Jack Grealish, capitán del Aston Villa de Inglaterra, quedó envuelto en un escándalo luego de violar el aislamiento obligatorio para asistir a una fiesta y chocar por manejar en pantuflas. Horas antes había grabado un video para los hinchas recomendándoles quedarse en sus casas.

El caso despertó la indignación de los británicos. Tanto la Policía de West Midlands como el club están investigando las circunstancias del accidente en el cual el jugador estrelló su Range Rover contra varios autos que estaban estacionados en la calle.

“Sólo quiero hacer un vídeo rápido para decir lo profundamente avergonzado que estoy de lo sucedido el fin de semana. Sé que es un momento difícil para todos estar encerrados durante tanto tiempo. Recibí una llamada de un amigo que me pidiera que fuera con él y accedí estúpidamente. No quiero que nadie cometa el mismo error que yo. Espero que todos acepten mis disculpas y que en un futuro cercano podamos disfrutar nuevamente juntos”, fueron las palabras que utilizó el futbolista en sus redes sociales para mostrar su arrepentimiento.

Aston Villa anunció que sancionará a Grealish. “Estamos profundamente decepcionados porque uno de nuestros jugadores ignorara los consejos del Gobierno sobre quedarse en casa mientras dure la crisis del coronavirus. Nuestro capitán entiende que su decisión fue incorrecta e innecesaria. Por tanto, será multado y todo lo que se recaude será donado a The University Hospitals Charity en Birmingham”, anunció la institución.