El primer caso se dio a media tarde, cuando contingentes provenientes desde Mendoza, Río Negro y Tandil intentaron ingresar al estadio y al querer pasar el tercer y último anillo de acceso no pudieron hacerlo porque se comprobó que sus entradas eran falsificadas.

Por caso los que habían llegado desde la ciudad bonaerense de Tandil en un ómnibus, según relataron, habían pagado un paquete completo que incluía traslado y entradas a cambio de 70.000 pesos.

Esas sumas se incrementaron hasta casi 200.000 en los casos de los que arribaron desde las provincias de Mendoza y Río Negro.

También fueron detenidas dos personas, según informaron fuentes policiales, vendiendo entradas falsificadas sobre la Avenida del Libertadores. Y ya entrada la noche en Núñez, un grupo de hinchas ya directamente sin boletos, intentó saltar los molinetes de acceso sobre la entrada que da a la avenida Udaondo pero la policía lo impidió y los dispersó.