El 2 de julio de 2005 concluía el 15º mundial de fútbol sub 20 y la selección argentinas se alzaba por quinta vez con dicho título. La deducción indica que en ese entonces el equipo albiceleste se había llegado uno de cada tres mundiales puestos en juego.

Esa quinta vuelta olímpica tuvo la particularidad de haber sido encabezada por Lionel Messi, que con el tiempo se convertiría en un referente mundial de este deporte. El aporte del jugador de Barcelona fue determinante. Fue el goleador del campeonato con seis tantos, y anotó los dos goles en la final frente al conjunto africano.

El comienzo del torneo no fue positivo para Argentina. Perdió ante Estados Unidos por 1 a 0, pero se recuperó ante Egipto al ganarle 2 a 0 con goles de Messi y Zabaleta, y luego a Alemania por 1 a 0, con tanto de Cardozo. Quedó segunda en su grupo.

En octavos de final venció a Colombia por 2 a 1 con goles de Messi y de Barroso, y en cuartos de final superó 3 a 1 a España con anotaciones de Zabaleta, Oberman y Messi.

En semifinales, la víctima argentina fue Brasil, al que superó 2 a 1 con goles de Messi y de Zabaleta. En la final, el equipo de Francisco Ferraro se impuso 2 a 1 a Nigeria con los dos tantos de penal de Messi, que ya empezaba a demostrar sus dotes excepcionales al mundo del fútbol.