En un tramo de enlace, circulando por una ancha avenida, Ogier transitaba por el carril del medio cuando cambió y se tiró a la derecha.

Por allí, de manera sorpresiva, aceleró un auto particular, provocando el choque entre ambos vehículos. La imagen fue captada por un aficionado, que rápidamente se hizo viral. Pero allí no terminaron los problemas para el piloto galo.

Minutos después, tras la llegada de agentes policiales, Ogier estaba apurado para continuar con la competencia. Uno de los efectivos de la fuerza de seguridad de Croacia se paró delante del Toyota del piloto francés, pero éste aceleró, desobedeciendo a la autoridad, mientras un integrante del equipo ya estaba en el lugar para continuar con los trámites por el incidente.