Navid Afkari, campeón de lucha libre de 27 años, ha sido ejecutado por el gobierno iraní después de ser encarcelado por participar en las protestas contra el gobierno en 2018. Afkari ha sido ejecutado este sábado en la cárcel de Adel Abad en Shiraz a pesar de las protestas internacionales.

Desde las redes sociales bajo el hashtag "no ejecutéis" la situación del iraní se hizo viral. Desde los propios organismos internacionales, así como los relacionados con los derechos humanos, denunciaron su situación al considerar que su acusación se produjo "de forma ilícita y todo fue en base a una condena política".

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Donald J. Trump on Twitter

El campeón de lucha libre profesional ha contado con la defensa de incluso el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, quien pidió a través de su cuenta de Twitter que "apreciaría mucho si ahorraran la vida de este joven y no le ejecutaran".

Según informa Amnistía Internacional, la solicitud de Afkari para una revisión judicial de su sentencia de muerte fue rechazada por el Tribunal Supremo. El 3 de septiembre fue trasladado del pabellón general después de que una grabación de voz de Afkari pidiendo ayuda a la comunidad internacional se difundiera en las redes sociales, generando así una protesta mundial.