La Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) tiene la difícil tarea de reconstruir todo el calendario futbolístico mundial, a causa de la pandemia por el coronavirus.

En ese plan, generó un grupo de trabajo encabezado por el presidente de la CONCACAF (Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe), el canadiense Víctor Montagliani, quien elaboró alternativas para que el fútbol pueda jugarse apenas la enfermedad brinde una tregua.

Una de esas opciones apunta a priorizar la finalización de los campeonatos nacionales en desmedro de las competencias internacionales, una de las cuales es la eliminatoria sudamericana.

"Creo que el fútbol local es una prioridad. Septiembre sigue programado (a nivel internacional), pero me atrevería a decir que no estoy seguro de que se mantenga firme con la dirección que lleva la situación en este momento'', dijo Montagliani.

El dirigente también puso en duda la realización de partidos este año en zonas muy castigadas por el coronavirus, como Europa y Estados Unidos. Y agregó: "Si recibimos luz verde para jugar al fútbol, dudo mucho que el primer juego sea con aficionados. No lo veo. Creo que eso sería un enorme riesgo''. "Estoy seguro de que sería algo gradual, al igual que sucederá con el resto de la sociedad en términos de volver a la normalidad''.

Sobre las eliminatorias, Montagliani dijo que podrían modificar el actual formato, teniéndolo que achicar en tiempo y partidos debido a las restricciones del calendario.