El argentino Sergio Agüero se despidió de la gente del Manchester City en una jornada a pura emoción: anotó dos goles en el triunfo por 5-0 al Everton, rompió un récord y recibió un homenaje. 

Pep Guardiola, entrenador del equipo, se emocionó hasta las lágrimas al referise al Kun.