El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) revisó la sanción que la Unión Europea de Fútbol (UEFA) le aplicó a Manchester City por violación del fair play y estableció que el club inglés podrá jugar la próxima edición de la Champions League.

El fallo de la UEFA conocido en febrero pasado castigaba a Manchester City por haber violado el fair play financiero al incluir bienes de capital como aporte de sponsors, lo que lo llevó a aplicarle una multa de 30 millones de euros y una marginación por dos años del máximo torneo continental europeo.

La Cámara de Adjudicaciones de la UEFA (CFCB) consideró, una vez revisadas todas las pruebas, que el City había “cometido graves infracciones en las regulaciones de licencias de la UEFA y en las regulaciones relativas al fair play financiero, al exagerar su beneficio de patrocinadores en las informaciones transmitidas a la UEFA entre 2012 y 2016”. 

A cambio, el TAS dio validez a su modificación que tiene el siguiente fundamento: “El Manchester City ha contravenido el artículo 56 de las regulaciones sobre licencias de clubes y sobre fair play financiero. El Manchester City tendrá que pagar una multa de 10 millones de euros a la UEFA en 30 días”, apuntó el TAS en un comunicado. El organismo aseguró que la mayoría de infracciones cometidas por el club inglés no se pudieron demostrar o habían prescrito. “Como las acusaciones sobre haber camuflado fondos de capital eran significativamente más graves que obstruir las investigaciones de la CFCB, no era apropiado imponer una exclusión de las competiciones europeas por no haber cooperado correctamente”.

Esta ha sido una gran noticia para Manchester City, que ayer se aseguró el subcampeonato en la Premier League y que tiene grandes chances de pasar a los cuartos de final de la Liga de Campeones, ya que debe jugar en su estadio la revancha ante Real Madrid, luego de haberlo vencido por 2 a 1 en el partido de ida en el estadio Santiago Bernabéu.