La organización de los Juegos Olímpicos de Tokio, que se realizarán a partir del 23 de julio del año próximo, tendrá especial cuidado en preservar la salud de los competidores y de los espectadores. Así lo hizo saber el director general de los Juegos, Yoshiro Muto, quien dio a entender que estos Juegos están concebidos para que puedan ser observados por el público desde las tribunas, aunque con una presencia limitada para evitar contagios de coronavirus.

"Para evitar que los Juegos sean a puertas cerradas, podría limitarse la cantidad de espectadores en cada evento deportivo, así estaría garantizado el distanciamiento social. Es una posibilidad que tenemos muy en cuenta", dijo Muto a la cadena británica BBC.

El encargado de la organización de los Juegos Olímpicos explicó que inclusive aun sin la existencia de una vacuna se permitiría la asistencia de espectadores a las gradas. 

"Los deportistas, la gente involucrada y los espectadores podrían ser sometidos a tests antes y después de llegar a Japón. El descubrimiento de una vacuna contra el coronavirus sería una gran ventaja pero no una condición para que puedan celebrarse", resaltó.