Los cuestionamientos siguen arreciando en la Casa Blanca. A la irregular campaña en la Liga, se suma la inminente eliminación en la Champions, si no logra salir indemne en su visita al Manchester City, donde debe ganar para no quedar eliminado de la máxima competencia de Europa. 

Zinedine Zidane es una gloria del madrilismo, como jugador y como técnico se ha cansado de ganar títulos, pero aún así, su continuidad pende de un hilo. Nadie ha graficado mejor lo que significa el club más ganador de España, como su presidente Florentino Pérez: "Esto es el Real Madrid y aquí sólo vale ganar". 

Así las cosas, en caso de que la temporada se cierre sin ningún título más que la Supercopa conquistada en Arabia es muy probable que Zidane no continúe en el Madrid, con el que le une contrato hasta junio de 2022. El principal candidato para sustituirle es un viejo conocido, Mauricio Pochettino. No resulta habitual que el mercado ofrezca a mitad de año la posibilidad de contratar a dos entrenadores de tanto prestigio como el argentino y Massimiliano Allegri, la segunda alternativa que también encaja en el perfil que busca el club blanco.

En Madrid saben que no pueden dilatar demasiado la situación, ya que Pochettino, luego de ser despedido en el Tottenham, es pretendido por el Manchester United y el París Saint Germain.