El partido, llevado a cabo en el Forsyth Barr Stadium de Dunedin por el Super Rugby Aotearoa, se definió a un minuto del final, con un drop convertido por Bryn Gatland, hijo de Warren, entrenador de Chiefs, quien había ingresado desde el banco de suplentes.

Volvió el rugby después de la pandemia de coronavirus

Este acontecimiento, tuvo un ingrediente extra: fue el primer encuentro de un deporte profesional que se llevó a cabo con una masiva presencia de público (cerca de 20 mil personas), después de que en algunos países se levantaran las restricciones por el Covid-19.

El Super Rugby Aotearoa es la versión neozelandesa del Súper Rugby que organiza la Sanzaar, y en el cual participa Jaguares.