La cuestión tomó estado público y es una discusión que excede a las necesidades. El presidente Alberto Fernández, ocupado, ya sentó postura y hasta citó una consulta que le hizo Angela Merkel en su gira europea.

La referencia es el cobro de impuestos a “las grandes fortunas” del país. En ese camino está un grupo de diputados nacionales del oficialismo, buscando gravar en un 1,5% los patrimonios de 200 personas y dos centenares de empresas.

Hugo Yasky explica: “Para cobrar el impuesto se tienen en cuenta las bases de declaración de bienes en los sujetos, y para las 200 empresas con mayores ventas según los registros de la AFIP en el año 2018”.

El dirigente espera que el texto se pueda tratar en el recinto, pese a casi el cese de actividades por el aislamiento obligatorio decretado en el país.

Entrevistado por radio Universidad, remarcó que se trata de “un impuesto de Emergencia, por única vez” y que aguardan recaudar “2.500 millones de dólares”, porque “no podemos afrontar esta pandemia con un Estado a media máquina”.

“Sobre el total de empresas, lo pagará un 0,0009 por ciento, y estamos hablando de sectores muy concentrados y poderosos. Construyeron sus grandes fortunas en el país, se han beneficiado de políticas del Estado y blanqueos, y hoy tienen que retribuirle al país, porque son los que lo pueden hacer”.

Aclaró que de aprobarse, el mecanismo sería para recaudar el dinero de forma “inmediata”, y que se administrará según las provincias “en base a necesidades por cómo las afecta la pandemia”.