Que las ventas de comerciantes cordobeses están por el piso, no es novedad.

Los meses pasan y los números siguen cayendo, y el pasado septiembre no fue la excepción.

Se trató del vigésimo período en rojo.

En ese sentido se expresó el informe de la Cámara de Comercio de Córdoba, remarcando una caída en ventas de casi el 6,5 por ciento.

Pero el dato más llamativo es que, en pesos, los negocios ven ingresar a sus cajas y cuentas casi la misma cantidad de billetes y montos que en 2018.

De hecho, la comparación interanual de facturación marca apenas una suba del 1,16 por ciento.

El contexto recesivo, claro está, es ampliamente visible en el 55% que marcó la inflación oficial entre agosto y el mismo mes del año pasado.