Luego del aumento en un 2,9% de los combustibles, en los primeros diez días del año, este sábado está previsto que exista una actualización similar.

La suba tendrá por objeto trasladar al valor de la nafta y el gasoil, el incremento del impuesto a los combustibles líquidos y el del dióxido de carbono, y para compensar el alza del tipo de cambio y la suba del precio internacional del petróleo.

Cabe recordar que el incremento de las naftas, efectuadas la semana pasada, se debió puntualmente a la actualización de los valores de los biocombustibles, que se incrementaron 59,3% para el biodiesel y 33% para el bioetanol de caña de azúcar.

Los precios en surtidor aumentarían alrededor de 3%.

Según una de las empresas refinadoras del mercado, los precios en surtidor deberían actualizarse 15% para acompañar todos los aumentos de costos. Pero este porcentaje quedó descartado por el Gobierno.

En diálogo con La Nación, Gabriel Bornoroni, presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines, agregó: "El 2020 fue un año muy difícil para el sector, y los números siguen mostrando esto. Esperamos que con el aumento de circulación por las vacaciones puedan mejorar las ventas, pero lo cierto es que nos encontramos todavía en niveles 20% menores que 2019. Eso es crítico para nuestro negocio, ya que para más de la mitad de las estaciones significa estar trabajando a pérdida. Esperamos un 2021 mucho mejor".

Fuente: La Nación.