Tal vez más distendido de lo habitual, el presidente Alberto Fernández dialogó con FM La Patriada este lunes, y el tema de la intervención a Vicentin S.A. fue central.

Asumió, en tal sentido, haber tenido "una percepción errada" de lo que ocurriría después de su anuncio, porque creí que "iban a salir todos a festejar".

Además de remarcar que sigue esperando otra alternativa, adujo creer que "estaba mucho más asumida la situación de crisis" y que era necesaria la intervención del Estado.

Al respecto, dijo: "Soy muy respetuoso de la propiedad privada, pero el Banco Nación también es propiedad privada y también le están debiendo $ 20 mil millones. Propiedad privada es todo, no es propiedad privada solo la de Vicentin".

En línea con su idea de no confrontar, dijo que "no tengo ganas de vivir en un país donde cada decisión que se toma se convierte en un Boca-River" y cuestionó: "Digo que me preocupa lo que está pasando con la principal exportadora oleaginosa del país y me dicen que soy un chavista que quiere expropiar. Si quisiera expropiar, no lo haría con una empresa en quiebra sino una cerealera floreciente".

Señaló que su idea es "que no desguacen judicialmente" a Vicentin.