Se cumple un año de la suspensión del grabado de autopartes en la provincia de Córdoba.

El contexto lo marca la denuncia oficial que data de octubre pasado, acusando a la firma Grababus, que realizaba el trámite obligatorio con autorización, de evadir el pago de cuarenta millones de pesos en impuestos.

En el proceso, obtuvo millonarias ganancias.

Este miércoles, el gobierno de la provincia de Córdoba extendió la prohibición por otros seis meses, con la publicación en el Boletín Oficial.

Ahora se estira medio año más, hasta abril próximo.

El hecho provocó en 2018 el despido de 140 personas de los talleres de la firma, que negó las acusaciones.