La deuda de Vicentin es "una maniobra fraudulenta con complicidad política" según informe de Lozano

Una maniobra tan compleja como fraudulenta derivó en una denuncia de las actuales autoridades del Banco de la Nación Argentina. Es que, puntualmente, la gestión de Javier González Fraga entregó, en créditos a la firma cerealera Vicentín, casi el 20% del patrimonio computable de la entidad.

En eso se basa una presentación oficial, que pide indagar por qué se fue extendiendo un préstamo a la empresa sin una declaración del Directorio del organismo. Uno de los directores del banco, Claudio Lozano, directamente adujo que "el propio Mauricio Macri llamaba a las autoridades" pidiendo por tal cuestión.

Declarada en cesación de pagos pese a que sus balances dan números en otra dirección y con sus dos plantas ubicadas en Santa Fe cerradas, hoy Vicentín le debe a la entidad bancaria oficial unos U$S 350.000.000 sobre los mil millones que adeuda en total. También le reclaman proveedores y trabajadores, además de los bancos Provincia de Buenos Aires, Hipotecario y Macro.

La firma recurría a solicitar un “adelanto” en dólares para prefinanciar exportaciones. En situaciones regulares, el dinero se usa para la compra, el traslado, acopio y procesamiento del cereal, pero el dinero se devuelve al cobrar. Pero en los años de gestión de González Fraga, no sólo se dejó de pagar el préstamo y se lo dejaba “pendiente hasta la próxima campaña”, sino que se le dio la posibilidad de ampliar el pedido.

No es menor el vínculo personal existente entre el propietario de Vicentín, Alberto Padoan, y el expresidente Mauricio Macri. De hecho a través de la empresa, de otras vinculadas y pagos particulares, realizó importantes aportes a la última campaña para la reelección del dirigente del Pro.

La ausencia de notificación de la situación en el directorio del Banco Nación es llamativa. Inclusive en varias ocasiones el Banco Central había enviado pedidos para ratificar si tal flexibilidad contaba con avales del Directorio del organismo.

Vicentín se declaró en quiebra el 6 de diciembre de 2019, pero venía de un lustro de un crecimiento impactante, llegando a ser la cuarta cerealera de mayor facturación en 2015 a ser la primera en su rubro en 2018.