En medio de la campaña electoral, con restricciones para la compra de dólares y en medio de un proceso inflacionario, empresas y familias eligen el plazo fijo para preservar el valor de sus ahorros, y dentro de esa alternativa, los depósitos no ajustables, es decir aquellos que sus tasas de referencia no se guían por el índice inflacionario, muestran un crecimiento en lo que va del año y ya representan casi 3 billones de pesos.

De acuerdo a los datos publicados por el Banco Central, los plazos fijos no ajustables representan el 46 por ciento de las colocaciones privadas, es decir casi la mitad, de los cuales el 54 por ciento pertenecen a personas físicas, mientras que el resto a empresas y sociedades. 

La mayoría de las colocaciones en esta alternativa son de corto plazo, ya que el 80 por ciento son a entre 30 y 59 días. En tanto que aquellos que optan por los depósitos entre 60 y 89 días representan poco más del 8 por ciento, mientras que el 9,5 por ciento elige plazos de entre 90 y 179 días. Las colocaciones entre 180 y 365 días son el 2,4 por ciento y a más de un año sólo el 0,1 por ciento.

El Banco Central fija la tasa mínima de referencia para los plazos fijos en pesos no ajustables. Foto: Cba24n
El Banco Central fija la tasa mínima de referencia para los plazos fijos en pesos no ajustables. Foto: Cba24n

Según informa Ámbito.com la tendencia de crecimiento se mantiene, teniendo en cuenta que el stock de plazos fijos en pesos no ajustables crecen a una tasa de 4 por ciento mensual y de 50 por ciento interanual, lo que implica un incremento de 30 mil millones de pesos respecto a julio y de más de 742 mil millones de pesos en lo que va del año.

Pero otro tanto sucede con los plazos fijos en pesos ajustables, que paga una tasa variable que ajusta por inflación más el 1 por ciento nominal anual, que pasaron de 55 mil millones de pesos a principios de año a 184 mil millones de pesos en la actualidad. Una de las diferencias con los plazos fijos en pesos no ajustables radica en que para poder realizar un plazo fijo UVA es necesario colocarlo como mínimo a 90 días de plazo.

Mientras hay una cierta estabilidad cambiaria, con la cotización del blue en torno a los 180 pesos, y la del dólar ahorro cerca de los 170 pesos, los ahorristas mantienen la tendencia a optar por el plazo fijo, pero el volumen de dinero depositado en su mayoría a menos de 60 días, genera una incógnita sobre que pasaría si la cotización se dispara. Sobre todo teniendo en cuenta que cerca de 2,4 billones de pesos se reciclan cada 45 días, con las renovaciones de los plazos fijos. Si parte de esos ahorros se direccionaran a la compra de dólar "blue", el Banco Central se enfrentaría con un problema de dimensiones importantes.

Fuente: Ámbito.com