En medio de la búsqueda de "evitar que se realicen prácticas comerciales que perjudiquen o impliquen un riesgo para la competencia u ocasionen distorsiones en el mercado”, este martes fue reglamentada la Ley de Góndolas.

Aprobada en febrero pasado, la pandemia obligó a un replanteo y postergación. Desde el gobierno nacional, el ojo se puso en el programa "Precios Máximos", que de a poco se irá desarticulando.

La decisión, publicada en el Boletín Oficial, dispone la distribución equitativa en supermercados y como norma, que la mitad de las mercaderías sean producidos por pymes y un 5% estará reservado para sectores de la economía popular.

Con su entrada en vigencia, una marca no podrá ocupar más del 30% del espacio disponible para un determinado artículo, o similares.

A su vez, la oferta deberá contar con un mínimo de cinco proveedores de una misma mercadería.

Por ley, desde ahora, los productos menos costosos deberán ubicarse "a una altura equidistante entre el primer y último estante” de la góndola y tener preponderancia en las páginas web de los comercios.