Era noviembre de 2017 y, con una inflación que iba camino a terminar en alrededor de un 25 por ciento, el presidente Mauricio Macri propuso a los distritos la idea del “Consenso Fiscal” que reorientaría varias cuestiones.

Córdoba fue detrás de la idea del mandatario y firmó. Pero este martes, el propio gobernador Juan Schiaretti firmará una adenda para suspender de manera temporaria (sería por un año), parte del articulado.

“Pasaron cosas”, lanzó alguna vez el propio Macri, y los dos años (el actual y el pasado) con inflación récord desde 1991 no pasaron desapercibidos. La devaluación afectó directamente a las provincias, que apuntaron a ajustes varios, recortes y complicaciones con las deudas en dólares.

Buscando menos “dependencia” de los distritos del Estado Nacional, y con la idea de asistir con algo de “aire” a las arcas, el gobierno nacional propuso suspender el compromiso asumido a priori por cinco años, de disminuir los porcentajes de impuestos “distorsivos”. Por ahora, entonces, seguirán igual.

Según cálculos en Finanzas de Córdoba, el hecho de sostener Ingresos Brutos e Impuesto a los Sellos significará el ingreso de unos 4.500 millones de pesos a la Provincia.