El reconocimiento explícito del técnico argentino, hizo actuar rápidamente a las autoridades que regulan el ascenso en el fútbol de Inglaterra. Marcelo Bielsa dijo públicamente, que había mandado a espiar los entrenamientos de su rival, el Derby County.

El Loco justificó el proceder, en la tradición no escrita del fútbol en nuestro país y el continente. Agregó, que es algo que realizó con cierta asiduidad, cuando dirigió la Selección Argentina, en el proceso de las eliminatorias sudamericanas.

Frank Lampard, entrenador del club afectado, se quejó y responsabilizó al técnico rosarino. No aceptó sus posteriores disculpas y solicitó que se legisle en la materia.

Además del revuelo que causó en el ambiente del fútbol de Inglaterra, Leeds recibió una multa de 200 mil libras, que pagó Bielsa de su propio bolsillo.

Semejante precedente, generó un cambio reglamentario. La English Football League (EFL), que regula el Ascenso inglés, informó que los clubes votaron una regla preventiva para evitar que vuelva a pasar. "Ningún club observará (o intentará observar), directa o indirectamente, la sesión de entrenamiento de otro club en el período de 72 horas antes de cualquier partido programado para jugar entre esos clubes", dice la medida.